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La comida trae alegría y placer a las personas en formas que van más allá de su valor nutricional. El hogar, la familia y el sentido histórico pueden influir la preparación de sus comidas favoritas. Para muchos de nosotros, la comida es una forma de mantener nuestra identidad cultural y permanecer conectados con nuestras raíces.
Cuando los pacientes son diagnosticados con cáncer de páncreas, se pueden sentir abrumados por los cambios que puede traer su jornada contra el cáncer. Es importante que los pacientes con cáncer mantengan un nivel de normalidad y eso incluye comer alimentos tradicionales que disfruten y que tengan un significado emocional.
La falta de apetito es un síntoma nutricional común para los pacientes con cáncer de páncreas. En ocasiones, la cirugía, los medicamentos o el cáncer pueden disminuir el apetito del paciente o cambiar el sabor de los alimentos. La pérdida de peso, ya sea por el tratamiento del cáncer o la malabsorción de nutrientes, también es común, al igual que la diarrea.
A pesar de estas complicaciones, las recetas se pueden modificar para garantizar que los pacientes puedan tolerar los alimentos y es posible preparar y disfrutar de platillos tradicionales que tienen un significado especial.
Aquí hay algunas sugerencias:
- Pruebe diferentes métodos de cocción. Por ejemplo, hornear, rostizar o hervir la carne pueden ser buenas alternativas a métodos como asar a la parrilla o freír, los cuales pueden hacer que los alimentos sean más difíciles de digerir.
- El uso de productos de soja (soya) como el tofu, la leche de soja o el edamame puede ayudar a mantener las características de un platillo y al mismo tiempo minimizar los efectos adversos de los productos lácteos, como gases, distensión abdominal o diarrea.
- Las verduras cocidas al vapor mantienen su valor nutricional y alivian los síntomas relacionados con el reflujo gástrico.
- Busque productos etiquetados “de grano entero” en lugar de “enriquecidos”. Los productos enriquecidos ya han perdido gran parte de su valor nutricional por su procesamiento y tienen menos fibra, vitaminas y minerales.
- Para los pacientes con un peso saludable, considere añadir de 5 a 6 cucharaditas de aceite al día. Los aceites saludables incluyen aceites de oliva, canola y maní o cacahuate, nueces, semillas y mantequillas de granos y semillas, así como aceitunas y aguacates.
Probar recetas que tienen un significado especial con los seres queridos que tienen cáncer de páncreas puede traer felicidad y placer. Al modificar los ingredientes y los métodos de cocción, es posible seguir disfrutando de esos deliciosos alimentos.
También considere las opciones de USDA My Plate , un sitio en internet del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, que ofrece opciones de alimentos saludables de todo el mundo. En su base de datos se puede hacer una búsqueda por estilos de cocina, requisitos dietéticos, equipo de cocina preferido y mucho más.
La Universidad de Texas Health Science Center de San Antonio se unió con varias organizaciones para desarrollar un libro de recetas titulado, Nuestra Cocina Saludable: Recetas de Nuestra Cocina Comunitaria. Este libro que contiene recetas de comidas saludables y sabrosas de la cocina latina.
